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La filmografía de Val del Omar de los años 30 no solamente se da por desaparecida en su mayor parte, sino que está pobremente documentada. De las decenas de documentales que supuestamente rodó para las Misiones Pedagógicas apenas ha quedado el mero registro de algunos de los lugares que visitó con la cámara, abarcando buena parte de la geografía española: de Andalucía (Las Alpujarras, Málaga, Córdoba) a Galicia (Santiago de Compostela, Malpica, Finisterre) y a la Cataluña pirenaica (Val d'Aran); y de las regiones levantinas (Murcia, Valencia) a diversas localidades en la España interior de Castilla, León o Aragón.
Entre las realizaciones de Val del Omar más referenciadas de dicha época, aparte de los documentales de Murcia y de Granada felizmente recuperados, cabe destacar los films que dedicó a Santiago de Compostela y a Las Hurdes, este último de cuatro rollos.
Se sabe que cuando Juan Ramón Jiménez marchó a Puerto Rico, el secretario del Patronato de las Misiones, Luis Álvarez Santullano, le entregó para su difusión allí algunos de estos documentales. (Según el propio Val del Omar, además, el poeta se habría llevado por error algunos originales: al menos el de Vibración de Granada.) Siguiendo esta pista, algunas pesquisas emprendidas en los últimos años en archivos e instituciones, en Estados Unidos y en Puerto Rico, no han dado por el momento ningún resultado.
En cuanto a la actividad cinematográfica de Val del Omar durante la Guerra Civil, parece que trabajó unos meses como operador del noticiario Gráfico de Ingenieros, dependiente de la Comandancia General de Ingenieros de las fuerzas republicanas –al mando del Coronel Ardid–, y se le ha atribuido una intervención mayor en al menos dos documentales: Gimnasio y Natación (1937 ambos, de los que se conservan algunas imágenes en Filmoteca Española).
Instalado después en Valencia, como funcionario del Ministerio de Instrucción Pública, participó en labores de salvamento del patrimonio artístico e histórico bajo la dirección de Josep Renau, colaboró en otras iniciativas activistas de éste y se adentró en el mundo de la radio según se detalla en otra parte.
Tras la toma de la capital levantina por las fuerzas facciosas, pudo salvar el pellejo gracias a sus conocimientos técnicos. Filmó por otra parte la entrada de los rebeldes, el 30 de marzo de 1939, en un documental que titularía Liberación de Valencia y que presentó al menos en una ocasión, en 1952 y en el Instituto de Cultura Hispánica. Este film, en paradero desconocido actualmente, no aparece mencionado sin embargo en la obra de referencia más exhaustiva sobre este período –el Catálogo general del cine de la Guerra Civil, de Alfonso del Amo y María Luisa Ibáñez (Madrid 1996: Cátedra y Filmoteca Española)– y, por tanto, es muy posible que Val del Omar lo rodara por iniciativa propia. [EB]
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